Desde la cornisa susurraban unas y otras en tono burlesco, esperando que Blanca volviera.
Pero ya era demasiado tarde; Blanca había decidido morir volando.
David Rebollo Genestar
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Tal vez algún día transforme éste espacio en una biografía ortodoxa, de momento le reservo el discutible honor de ser un vacío lleno de palabras.
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1 comentarios:
''Y no hay nada peor que un demasiado tarde.''
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